"Está y no estuvo, pero estuvo y calla. El frío quema y en tus ojos nace su memoria. Recordar es obsceno, peor: es triste. Olvidar es morir". V.Aleixandre.
"Aun siendo brillante, efímero, inaccesible tu recuerdo, como el de ambos astros basta para iluminar ausente toda esta sombra que me envuelve". Luis Cernuda.
Aquel momento que flota nos toca de su misterio. Tendremos siempre el presente roto por aquel momento. Toca la vida sus palmas y tañe sus instrumentos. Acaso encienda su música sólo para que olvidemos. Pero hay cosas que no mueren y otras que nunca vivieron y las que hay que llenan todo nuestro universo. Y no es posible librarse de sus recuerdos. (José Hierro)
(Calle Real-Santa Cruz de la Palma) Es una calle larga y silenciosa. Ando en tinieblas y tropiezo y caigo y me levanto y piso con pies ciegos las piedras mudas y las hojas secas y alguien detrás de mí también las pisa: si me detengo, se detiene; si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie. Todo está oscuro y sin salida, y doy vueltas en esquinas que dan siempre a la calle donde nadie me espera ni me sigue, donde yo sigo a un hombre que tropieza y se levanta y dice al verme: nadie. (Octavio Paz)
¿Qué loco sembrador anda en la noche, aventando luceros que no han de germinar nunca en la tierra? ¿Qué loco labrador rotura día a día la tierra para surcos de luceros? dulce maría loynaz.
El otoño se acerca con muy poco ruido: apagadas cigarras, unos grillos apenas, defienden el reducto de un verano obstinado en perpetuarse, cuya suntuosa cola aún brilla hacia el oeste. Se diría que aquí no pasa nada, pero un silencio súbito ilumina el prodigio: ha pasado un ángel que se llamaba luz, o fuego, o vida. Y lo perdimos para siempre. Ángel Gonzáles.
DONDE HABITE EL OLVIDO VI El mar es un olvido, una canción, un labio; el mar es un amante, fiel respuesta al deseo. Es como un ruiseñor, y sus aguas son plumas; impulsos que levantan a las frías estrellas. Sus caricias son sueño, entreabren la muerte, son lunas accesibles, son la vida más alta. Sobre espaldas oscuras las olas van gozando. Luis Cernuda.
Para no sentir el horrible peso del tiempo sobre sus espaldas, hay que embriagarse sin tregua. De vino, de poesía o de virtud, a vuestra elección. Pero embriáguese. Baudelaire.
"Vuelve a menudo y tómame, amada sensación, vuelve y tómame- cuando del cuerpo la memoria despierta, y un antiguo deseo vuelve a pasar por la sangre; cuando los labios y la piel recuerdan y las manos sienten como que tocan otra vez. Vuelve a menudo y tómame en la noche, cuando los labios y la piel recuerdan..." Cavafis.
Amor que llegas tarde, tráeme al menos la paz: Amor de atardecer, ¿por qué extraviado camino llegas a mi soledad. Amor que me has buscado sin buscarte, no sé qué vale más: la palabra que vas a decirme o la que yo no digo ya... Amor...¿No sientes frío? Soy la luna: Tengo la muerte blanca y la verdad lejana...No me des tus rosas frescas... Soy grave para rosas.Dame el mar... Amor que llegas tarde,no me viste ayer cuando cantaba en el trigal... Amor de mi silencio y mi cansancio, hoy no me hagas llorar. (Dulce María Loynaz)
Las islas en que vivo: Un día habrá una isla que no sea silencio amordazado. Que me entierren en ella, donde mi libertad dé sus rumores a todos los que pisan sus orillas. Solo no estoy.Están conmigo siempre horizontes y manos de esperanza, aquellos que no cesan de mirarse la cara en sus heridas, aquellos que no pierden el corazón y el rumbo en las tormentas, los que lloran de rabia y se tragan el tiempo en carne viva. Y cuando mis palabras se liberen del combate en que muero y en que vivo, la alegría del mar le pido a todos cuando partan su pan en esta isla que no sea silencio amordazado. (Pedro García Cabrera)
"LA CONSTRUCCIÓN DE UN SUEÑO" Siempre hay tiempo para un sueño. Siempre es tiempo de dejarse llevar por una pasión que nos arrastre hacia el deseo. Siempre es posible encontrar la fuerza necesaria para alzar el vuelo y dirigirse hacia lo alto. Y es allí, y solo allí, en la altura, donde podemos desplegar nuestras alas en toda su extensión. Solo allí, en lo más alto de nosotros mismos, en lo más profundo de nuestras inquietudes, podremos separar los brazos, y volar. Dulce Chacón.