UN RECUERDO IMBORRABLE
Desde que te vi por primera vez, ya no he vuelto a ser el mismo. Me cambiaste la vida. Han pasado muchos años, pero te sigo recordando igual.¡Qué alegría y placer fue conocerte!Al rememorar y echar la vista atrás, aún me llega la memorable sensación que tuve al verte; todavía hoy me inundan oleadas de placer.¡Qué gratamente olías!
Pero lo mejor que tenías, sin duda ninguna, era tu sabor y magnifica textura. Recuerdo con gran placer, que mientras estabas en reposo, me atrevía furtivamente a tocarte sutilmente. Para después chuparme con fruición la punta del dedo, oliéndome a vainilla.
Impresionado sigo y todavía me dura la impresión que me causaste al verte en tu esplendor, cuando metí la cuchara parecía una erupción volcánica derramándote por todos los lados.Tal era el frenesí de ríos de caramelo que arrastraban los trocitos de galleta, que conformaba la irresistible natilla que preparaba mi abuela.
Comentarios
Precioso tu recuerdo.
me convidas?
un abrazo.
Un abrazo.
Gracias por recordarlas, tal vez este fin de semana sea momento de visitar a mi abuela y hablar de nuestras cosas, y por qué no, disfrutar sus natillas.
Un abrazo
un abrazo.
Yo también he experimentado ese placer =P
Un fuerte abrazo
Has llevado nuestra imaginación muy, pero que muy lejos, de esas natillas tan apetitosas.
Un abrazo.