Entradas populares de este blog
Tres flores.
"SÁBADO DE MERCEDES" "Lo apetecible de un plátano"
El árbol de Ardilla Roja En el supermercado, el carro de la compra empujado por dos manos firmes enfilaba el pasillo con determinación. La persona que lo guiaba sabía lo que buscaba, lo tenía muy claro, sus deseos no eran ambiguos; iba a comprar fruta. Le apetecía comer fruta, por tanto se dirigía al expositor de la fruta. Al llegar a él, se paró y con mirada escrutadora e intensa, hizo un primer análisis de lo que veía: toda la fruta estaba muy apetecible. Pero su mirada se detuvo en lo que tenía en la mente: una hermosa manilla de plátanos. ¡Eran una maravilla de plátanos! Como los había imaginado: grandes, gordos y bien proporcionados. Se atrevió con las yemas de los dedos a tocar uno; lo encontró duro y consistente. Aún no estaban maduros, pero se conservarían mejor. No le gustaban los plátanos fofos. Los prefería tal como estaban, duros y todavía verdes. Pasados unos días, estaran maduros. Leyó la pegatina que tenía pegada la manilla, se tranquilizó y relajó eran de Canarias. S...
Comentarios
un beso.
nunca un odio
fue tan enaltecido
por un desamor
el desamor fue tanto, que el odio fue su razòn de ser..o el odio fue tanto, que alimentò al desamor...
Saludos!
Mis cariños.
Un saludo cariñoso
=S
Buen haikú.
Saludos.
Un abrazo!!
Dice la letra de una canción:
"Odio quiero más que indiferencia..."
Al desamor no le sienta nada bien ningún traje. Y tu haiku sugiere una tormentosa relación.
Un abrazo